Páginas

titulo

titulo

sábado, 23 de febrero de 2013

Justo Vega y Adolfo Alfonso

Homenaje de Adolfo Alfonso a su gran amigo Justo Vega. No se puede decir nada más, sólo hay que oír esta controversia.



ADOLFO
Cuando hablo de Justo Vega
en toda su maestría
hablo de la poesía
que tanto al pueblo le llega;
el que con el verso juega
y con las musas comparte,
el que en amor se reparte
es, por su altísima hechura,
un sol para la cultura
y una joya para el arte.

JUSTO
Dime tú, que eres mi hermano,
¿qué es lo que yo puedo hacer
para cumplir mi deber
en este altísimo plano?
¿Qué puede hacer un anciano
improvisador aquí?
Como en el campo nací
y me preparé muy mal
el nivel de Recital
es muy grande para mí.

ADOLFO
Aquí tú puedes hacer
muchas cosas, compañero,
porque tienes un cantero
de versos donde escoger;
aquí tú puedes correr,
aquí tú puedes volar,
aquí tú puedes cantar
y aquí puedes, a tu modo,
hacer de todo, de todo
lo que puedas inventar.

JUSTO
Te vuelves a equivocar,
mi vuelo está prohibido
porque yo jamás he sido
pájaro para volar;
yo no puedo recitar
porque nada me aprendí
de los versos que escribí,
por eso en este plantel
Recital es un nivel
más que grande para mí.

ADOLFO
Aquí puedes recitar
igual que otros interpretan
«Los zapatitos me aprietan»
o «A la orilla del palmar»;
tú puedes vocalizar
el pentagrama completo
y, a un nuevo ritmo sujeto
con el grupo o con la orquesta,
para terminar la fiesta
nos puedes cantar «El reto».

JUSTO
El Recital está bien
para las voces que cantan
y que improvisando encantan
al público sin desdén;
es excelente también
para la voz de Celina
y para tu voz genuina
no para mí que, por viejo,
soy como un triste cangrejo
en el fondo de una ruina.

ADOLFO
Este programa está bien
para un hombre como tú,
fuerte como el sabicú
y rápido como el tren;
todos los que a ti te ven
saben que no eres cangrejo,
pero si por un complejo
pretendes seguir así
antes de salir de aquí
te canto el «Caballo viejo».

JUSTO
Como el caballo cansino
subir la loma no puedo
y si lo intento me quedo
a la mitad del camino;
por lo tanto, determino
ponerle punto final,
y por justo y por social
llevo cifrado en el pecho
todo el honor que me han hecho
ustedes en Recital.

ADOLFO
De Justo Vega aprendí,
en nuestro andar, muchas cosas,
cosas que han sido valiosas
en la vida para mí;
desde que lo conocí
Justo ha sido un compañero
noble, leal y sincero,
puro corazón guajiro,
por eso tanto lo admiro,
por eso tanto lo quiero.